domingo, 21 de septiembre de 2008

Movilidad sostenible


Concluye hoy la Semana Europea de la Movilidad Sostenible, tras la celebración de distintos talleres, encuentros y otras actividades de las que desgraciadamente los medios de comunicación no se han hecho todo el eco que cabría esperar.

Más de una vez (y de dos), en medio de un atasco infernal de indeterminada duración, y ante mi creciente nivel de impaciencia, me he preguntado por qué habrá tan escasas y malas infraestructuras en según qué ciudades españolas. No obstante, si bien es cierto que a veces me avergüenzan mis propias elucubraciones cuando pienso en qué se puede estar gastando el Gobierno nuestros impuestos, tras tragarme un bache tras otro, todos ellos de padre y muy señor mío, entiendo que quizá todo el problema se derive de un error de enfoque. No es tanta la necesidad de más carreteras y autovías, que multiplicarían el número de coches y, en consecuencia, la contaminación ambiental y acústica, como la falta de incentivos al transporte público u otros medios alternativos, como la bicicleta.

Es el caso de Granada, donde se ha eliminado gran parte del carril-bici para, en su lugar, ampliar el número de plazas de aparcamiento, tratando de responder a las quejas de los comerciantes que veían en el carril-bici un hipotético descenso de clientela (claro, es que los ciclistas no compran, viven del aire), o Málaga, donde no sólo el transporte público en determinadas barriadas es escaso y tercermundista, sino donde, para más inri, el Ayuntamiento ha tenido la brillante idea de implantar el carril-bici en el interior del Parque Tecnológico de Andalucía, quizá dando por hecho que los trabajadores del mismo han de teletransportarse hasta sus centros de trabajo y, ya en el Parque, hacer uso de sus bicicletas. Porque a mí que hagan el favor de explicarme cómo se llega en bici por una autovía infernal o una carretera convencional infestada de vehículos que consideran a los ciclistas una suerte de molestos parásitos que hay que erradicar. ¿Alguna subvención que justificar, Sr. Alcalde?

Distinto es el caso de Sevilla, por ejemplo, o de Córdoba, donde los carriles bici son una apuesta segura de sus respectivos consistorios y donde, efectivamente, se ve gente a todas horas dándole a los pedales, lo cual no sólo es sostenible y barato, sino también sano.

Aun así, y pese a hacernos testigos de un error de gestión tras otro, algunos Ayuntamientos y colectivos han llevado a cabo determinadas iniciativas para conmemorar la Semana Europea de la Movilidad Sostenible. Mañana, en Badajoz, se cerrará la Avenida de Huelva al tráfico rodado, de ocho de la mañana a tres de la tarde, con motivo del Día Mundial Sin Coche. En otras localidades, como Elche, se han convocado "bicifestaciones", como la que tuvo lugar ayer, o como la que se celebrará en Madrid a lo largo de esta mañana. En Málaga, por ejemplo, los autobuses serán gratuitos durante todo el día de hoy. mientras que en Valencia, un grupo de escaladores de Greenpeace ha colocado una mascarilla al toro de Osborne presente en la A-1, junto con un cartel que reza "Stop CO2" para concienciar a los conductores.

De todos modos, en muchos casos, las actividades propuestas por las instituciones no son más que, en palabras de Ecologistas en Acción, "chapuzas propagandísticas" que no llevan a nada. Por tanto, queda en la conciencia de cada uno la opción de reflexionar, a título personal, acerca de lo que está en nuestra mano para minimizar el impacto ambiental de nuestra necesidad de transporte y hacer de ello una labor un poco más sostenible.

No hay comentarios: